Grasas, proteínas, y su relación con los sistemas de asa cerrada
Hablamos mucho sobre cómo afectan los hidratos de carbono a nuestras mediciones y niveles de glucosa, pero ¿cómo afectan las grasas y las proteínas a la glucemia? Hoy tenemos a Rocío Maraver (La Mesa Azul) en nuestra web para que nos hable de ello.
Sabemos que uno de los factores más importantes a tener en cuenta para alcanzar un buen control glucémico después de las comidas es gestionar adecuadamente los alimentos que haya en nuestro plato, es decir la calidad y la cantidad de los diferentes grupos de alimentos será determinante para tener unos adecuados valores glucémicos después de comer.
Cuando hablamos de grupos de alimentos, hablamos de verduras, frutas, pescados, carnes, legumbres, cereales, tubérculos, etc. Todos estos grupos de alimentos están formados por nutrientes (hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas, minerales y fibra).
De todos estos nutrientes, sabemos que los hidratos de carbono son los que tienen un impacto más inmediato en la glucemia, por ello se requiere de herramientas como el contaje de hidratos de carbono o el plato saludable para aprender a escoger porciones adecuadas de estos alimentos y así ajustar el tratamiento de insulina, en las personas insulinodependientes.
Sin embargo, no son sólo los hidratos de carbono los nutrientes que van a tener un efecto sobre la glucemia. Las grasas y las proteínas también tienen un impacto significativo en la glucemia unas horas después de haberlas ingerido. Es decir, su impacto en la glucemia no es tan rápido como el de los hidratos de carbono pero también van a incidir.
Las grasas provocan que el vaciado gástrico (el paso de la comida del estómago al intestino) sea más lento y son causantes de una resistencia posterior a la acción de la insulina. Esto significa que las comidas con grasa elevan los niveles de glucosa más lentamente y los mantienen elevados durante más tiempo. Cuando las grasas y las proteínas se ingieren juntas suman su efecto elevando los niveles de glucosa tardíamente. En ocasiones, se produce hipoglucemia inicialmente y después hiperglucemia más allá de la tercera hora con una duración proporcional a la cantidad de grasas ingeridas. Muchas veces se necesita menos insulina justo después de comer y un poco más entre 3 y 8 horas después de la ingesta.
Pero, ¿cómo podemos contar la cantidad de grasa y proteína de los alimentos?
Así como utilizamos los gramos o las raciones para medir los hidratos de carbono de un alimento, para calcular las grasas y proteínas nuestra herramienta es la UGP (unidad grasa - proteína), que no es más que nuestra "moneda" para saber si un alimento tiene una cantidad de grasas y/o proteína lo suficientemente significativa para que impacte a nuestra glucemia después de tres horas de la ingesta.
Las UGP se miden en calorías (Kcal). La Sociedad Española de Diabetes (SED) estableció que: 150 kcal correspondían a una Unidad Grasa Proteína (UGP).
Para calcular las Unidades de Grasa-Proteína (UGP), tenemos que saber que un gramo de grasa nos aporta 9 Kcal y un gramo de proteína 4 Kcal. Para ello nos será de gran ayuda contar con un material que nos proporcione estos datos como las tablas de grasas y proteínas que recientemente hemos publicado en La mesa azul.
Como ves, para poder alcanzar un adecuado control glucémico después de comidas altas en grasas y proteínas, es algo más complejo que si sólo tenemos en cuenta los hidratos de carbono.
Es por ello, que cada vez cobran más importancia los sistemas de asa cerrada (sistema que integra una bomba de insulina, un monitor continuo de glucosa en tiempo real y un algoritmo de control) para poder llegar a un mayor tiempo en rango y así poder manejar mejor las comidas, sea cual sea su composición.
Por ejemplo, en algunos de estos sistemas existe la opción “ingesta con alto contenido en grasa”, acción que le dice a la bomba de insulina que el bolo administrado debe ser distinto. El algoritmo que llevan estos sistemas puede administrar todo el bolo de una sola vez o hacerlo en dos partes. Si se selecciona una comida con alto contenido en grasa, la segunda parte del bolo de insulina calculado se administrará a los 60 minutos.
Esperamos que te haya gustado este artículo y te haya servido de ayuda para poner en práctica el contaje de UGP para alcanzar mejores controles glucémicos con este tipo de comidas.