Guía de uso de una bomba de insulina durante el embarazo
Las mujeres con diabetes de tipo 1 pueden usar diversas tecnologías para controlar la diabetes antes, durante y después del embarazo1. Una de estas tecnologías es la bomba de insulina1.
Tener diabetes estando embarazada entraña ciertos retos2 que se abordan, cada vez más, a través de tecnologías como las bombas de insulina1,2.
Pero, ¿qué tienes que saber sobre el uso de una bomba de insulina durante el embarazo? ¿Y cuáles son los riesgos y los beneficios de la tecnología de bomba de insulina durante el embarazo?
En este artículo te ofrecemos algunas respuestas a estas preguntas. También te ofrecemos información que te ayudará a decidir si usar una bomba, así como recomendaciones sobre cómo usarla antes, durante y después del embarazo.
Embarazo y diabetes: algunos retos únicos
El control de la glucosa en sangre durante el embarazo resulta complicado debido a aspectos como la amplia fluctuación de las necesidades de insulina que ocasionan los cambios hormonales continuos2.
Si tienes diabetes y piensas quedarte embarazada, debes saber algunas cosas:
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Los objetivos de glucosa en sangre serán más estrictos durante el embarazo3.
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La hiperglucemia durante el embarazo entraña riesgos para el feto y eleva el riesgo de sufrir complicaciones durante el parto y para el bebé; si desarrollas niveles altos de glucosa en sangre, es esencial que reacciones rápidamente3.
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Debido a los continuos cambios hormonales que se producen durante el embarazo, tus necesidades de insulina fluctuarán mucho2, tanto durante el embarazo como después del parto3. Por ejemplo, al principio del embarazo, aumenta la sensibilidad a la insulina1. Sin embargo, a medida que la gestación avanza, aumenta la resistencia a la insulina1.
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El riesgo de hipoglucemia en la madre aumenta durante el embarazo, especialmente al final del primer trimestre y al principio del segundo, y después del parto3. Alrededor del 10 % de las mujeres con diabetes visitan el hospital como mínimo una vez durante el embarazo debido a una hipoglucemia3. Esta está provocada por las demandas del feto, que reducen los niveles de glucosa en sangre de la madre2.
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Durante el embarazo, existe un mayor riesgo de cetoacidosis diabética3. Ello se debe a que el embarazo constituye un estado cetogénico3 (un estado metabólico en el que la sangre tiene una concentración elevada de cetonas).
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Las náuseas, los vómitos y la falta de apetito pueden complicar el embarazo a las mujeres con diabetes de tipo 11.
El objetivo del tratamiento con insulina durante el embarazo es lograr perfiles de glucosa en sangre similares a los de las mujeres embarazadas sin diabetes y con tolerancia normal a la glucosa2, lo que pueda ayudar a reducir algunos de los riesgos antes citados2.
Información sobre las bombas de insulina
Una bomba de insulina es un pequeño dispositivo digital que administra insulina de acción rápida al organismo de forma continua4.
Por lo general, la insulina se administra a través de un pequeño catéter insertado en el tejido subcutáneo y pegado a la piel con un adhesivo4. El lugar en el que el catéter se inserta bajo la piel se denomina set de infusión o cánula de infusión4.
En la mayoría de las bombas, el set de infusión se conecta a la bomba, que contiene un depósito de insulina, a través de un tubo de plástico4. También cuenta con una interfaz que te permite controlar el dispositivo1.
Algunas bombas, llamadas «bombas de parche», no tienen tubo, sino que se aplican directamente a la piel4. Estas bombas administran la insulina a través de un set de infusión y se programan desde un dispositivo portátil remoto, utilizando tecnología inalámbrica4.
La bomba de insulina también se denomina infusión subcutánea continua de insulina (ISCI)1,4.
¿Puedes utilizar una bomba de insulina durante el embarazo?
En pocas palabras, sí. El uso de bombas de insulina está ganando adeptas entre las embarazadas porque imitan mejor la administración de insulina de un páncreas humano sano2.
Diversas directrices también han recomendado el uso de bombas de insulina durante el embarazo para controlar los niveles de glucosa en sangre2.
Varios organismos públicos y asociaciones de diabetes avalan el uso de bombas de insulina durante el embarazo1,2.
Beneficios y riesgos del uso de una bomba de insulina durante el embarazo
Los datos de ensayos de buena calidad sobre el tratamiento con ISCI son muy limitados1. Sin embargo, los estudios que existen indican que las bombas de insulina tienen los siguientes riesgos y beneficios.
Beneficios de las bombas de insulina
A continuación, te contamos algunas de las ventajas y los beneficios del tratamiento con bomba de insulina durante el embarazo:
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Mejora de las concentraciones de HbA1c2
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Reducción de los episodios de hipoglucemia2
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Reducción de las fluctuaciones de los niveles de glucosa en sangre2
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Reducción de la dosis diaria total de insulina2
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Mejora de la calidad de vida (CdV)2
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Mayor flexibilidad en el estilo de vida, especialmente por lo que se refiere a los horarios de las comidas y los viajes2
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Mayor facilidad de tratamiento de la enfermedad matutina2
La flexibilidad que ofrecen las bombas para administrar la insulina puede ayudar a cumplir objetivos de glucosa en sangre más estrictos a pesar del aumento de la resistencia a la insulina durante el embarazo1. El tratamiento con bomba permite afinar mucho las dosis de insulina (hasta un décimo de una unidad de insulina)1.
No existen ensayos controlados aleatorizados que comparen el tratamiento con ISCI con el tratamiento con MID (múltiples inyecciones diarias) antes del embarazo o durante el mismo3. Sin embargo, recientes estudios observacionales (aunque con limitaciones) han revelado que los niveles de glucosa en sangre son menores en el tratamiento con ISCI que con MID en el primer y segundo trimestres del embarazo1,2,3.
Riesgos e inconvenientes de las bombas de insulina
Los riesgos e inconvenientes de las bombas de insulina son, entre otros:
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El coste de las bombas de insulina y los equipos conexos es elevado2
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Las bombas de insulina pueden provocar un aumento de peso2
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Riesgo de infección si la cánula no se cambia según las recomendaciones2
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Riesgo de cetoacidosis si se interrumpe la administración de insulina2
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El uso indebido de bolos puede ocasionar la acumulación de la insulina y niveles bajos de glucosa en sangre2
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Si la bomba o el usuario no administra correctamente la insulina puede producirse hiperglucemia o cetoacidosis1
La cetoacidosis constituye una amenaza real para el feto1. En caso de avería de una bomba (o de enfermedad), deben seguirse las reglas de los días de enfermedad1.
Algunos estudios han revelado tasas más elevadas de aborto espontáneo entre las usuarias de bombas de insulina3. Sin embargo, ello puede deberse a que las usuarias de bombas empiezan a planificar antes la atención gestacional, lo que da lugar a un mejor registro de los abortos espontáneos3.
También se notificó una incidencia más elevada de bebés grandes para la edad gestacional en mujeres que utilizaban bombas de insulina en comparación con las que recibían tratamiento con MID3.
Cómo iniciar un embarazo con una bomba
Si planeas quedarte embarazada, tu equipo médico te facilitará toda la información que necesitas para iniciar un tratamiento con bomba de insulina. Recuerda que Las bombas de insulina son productos sanitarios sujetos a prescripción médica.
Debes hablar con un enfermero especializado o un dietista del equipo sobre:
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Cómo mantener un buen control de los niveles de glucosa en sangre al pasar de MID a la bomba3
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Cómo ajustar los parámetros de la bomba de insulina a lo largo del embarazo, a medida que tus necesidades cambian3
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Cómo modificar los parámetros después del parto1
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Qué hacer en caso de hiperglucemia idiopática3
Es importante prepararse para un fallo de la bomba o el set de infusión, a fin de prevenir la hiperglucemia y la cetoacidosis, que pueden desarrollarse en cuestión de horas3. Debes llevar siempre contigo plumas de insulina de reserva (insulina de acción prolongada y de acción rápida)3.
En los primeros días tras el inicio del tratamiento con ISCI durante el embarazo, es importante controlar los niveles de glucosa en sangre y hablar con tu equipo todos los días3. Debes ajustar los parámetros de la bomba cada uno o dos días hasta optimizarlos3.
Tratamiento con bomba de insulina durante el embarazo
Si decides utilizar una bomba de insulina durante el embarazo, debes tener presente que las necesidades de insulina variarán mucho durante este período, y tendrás que revisar los parámetros de la bomba con frecuencia3.
Por ejemplo, puede que necesites menos insulina durante el primer trimestre3. Sin embargo, las necesidades aumentarán a partir de la semana 16-203.
Tendrás que ajustar la dosis de insulina en bolo en consecuencia. Las necesidades de insulina en bolo variarán más que las de insulina basal durante el embarazo3.
También es posible que debas establecer todos los objetivos de glucosa en sangre (alto, bajo, individual) en 5,0 mmol/l3. Este objetivo podría ser mayor si sufres hipoglucemias3.
Reglas de los días de enfermedad
Por lo general, las reglas de uso de la bomba de insulina durante los días de enfermedad en el embarazo son las mismas que cuando no estás embarazada3.
Sin embargo, puesto que las mujeres con diabetes sufren mayor riesgo de desarrollar cetoacidosis diabética (CAD) cuando están embarazadas3, existen algunas diferencias fundamentales:
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Las mujeres embarazadas deben disponer de un sistema de análisis de cetonas en sangre y no fiarse de los análisis de cetonas en orina3
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Si los niveles de cetonas en sangre son superiores a 1,0 mmol/l, debes aumentar la dosis de insulina y controlar más las cetonas3
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Si tienes diabetes, estás embarazada y los niveles de cetonas son superiores a 3 mmol/l, debes ir a urgencias3
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Si los niveles de cetonas oscilan entre 1,1 y 3 mmol/l y no descienden en el plazo de dos horas, debes ir a urgencias3
Resolución de problemas con la bomba
En general, si utilizas una bomba de insulina durante el embarazo, debes rotar el lugar de infusión cada 24-48 horas para reducir el riesgo de obstrucciones (y de aumento de los niveles de glucosa en sangre) y para evitar infecciones cutáneas o problemas con la absorción de la insulina2.
Si la cánula se obstruye, se dobla o se desacopla, puedes aplicar una inyección subcutánea para prevenir o corregir una hiperglucemia en lo que sustituyes la cánula1.
Si con ello no se corrigen los niveles de glucosa en sangre, debes seguir las reglas habituales de los días de enfermedad1 y vigilar los niveles de cetonas en sangre1. Puede que tengas que utilizar MID o infusiones intravenosas de insulina temporalmente en lugar de la bomba1.
Parto
Si tienes previsto utilizar una bomba de insulina durante el parto, tus niveles de glucosa deben estar muy bien controlados1. Tendrás que realizar ajustes de la tasa basal de insulina y de las dosis de corrección en bolo1.
Por lo general, se recomienda reducir temporalmente la tasa basal un 25-30 % durante el parto1. La hipoglucemia debe tratarse con una fuente de glucosa de acción rápida, a veces puede ser una bebida azucarada o gominolas1. Siempre debes seguir las recomendaciones de su médico en estas situaciones.
Si la bomba no controla correctamente los niveles de glucosa en sangre, pueden aplicarse infusiones intravenosas de insulina mientras se detiene la bomba temporalmente1.
Uso de bomba de insulina tras el parto
Inmediatamente después del parto, la resistencia a la insulina desaparece1. Los parámetros de la bomba y la dosis de insulina deben modificarse para reflejar este hecho1.
Por lo general, los parámetros después del embarazo serán los mismos que antes de este1. Sin embargo, las mujeres sufren mayor riesgo de hipoglucemia hasta varios días después de dar a luz3, por lo que tendrás que reducir la tasa basal para prevenir episodios de hipoglucemia1.
Como recomendación general, se aconseja un objetivo de glucosa en sangre de entre 108 y 180 mgl/dl para la primera semana tras el parto3. Tu médico es quien te dará tu rango objetivo personal.
Las bombas de insulina se pueden utilizar durante el embarazo y aportan muchos beneficios1,2.
Sin embargo, también comportan riesgos que se han de considerar2. Si eliges esta tecnología durante el embarazo, deberás comprometerte a obtener los mejores resultados para tu salud y la de tu bebé3.
Fuentes
- Thomas SJ. Crabtree, Anastasios Gazis. Insulin pumps and diabetes technologies in pregnancy: an overview for the obstetrician. Obstetrics, Gynaecology & Reproductive Medicine, Volume 30, Issue 4, 2020, Pages 126-129, ISSN 1751-7214, https://doi.org/10.1016/j.ogrm.2020.02.002.
https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S1751721420300154 - Kesavadev J. Insulin pump therapy in pregnancy. J Pak Med Assoc. 2016 Sep;66(9 Suppl 1):S39-44. PMID: 27582150.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/27582150/ - The Association of British Clinical Diabetologists (ABCD), BEST PRACTICE GUIDE: Using diabetes technology in pregnancy, Version 2.0, March 2020. https://abcd.care/resource/best-practice-guide-using-diabetes-technology-pregnancy
- Berget, Cari, Laurel H. Messer, and Gregory P. Forlenza. A clinical overview of insulin pump therapy for the management of diabetes: past, present, and future of intensive therapy., Diabetes Spectrum 32.3 (2019): 194-204. https://diabetesjournals.org/spectrum/article/32/3/194/32620/A-Clinical-Overview-of-Insulin-Pump-Therapy-for